El gobierno de Estados Unidos pretende restringir el libre comercio de las legumbres y frutas que exporta México al condicionarlas para que sólo surtan remanentes en función de sus éxitos de producción.
La propuesta de “temporalidad” fue presentada al equipo negociador que encabeza Ildefonso Guajardo, en la tercera ronda de negociaciones en Ottawa, fruto de las presiones de productores locales que buscan impedir la competencia desde México.
Tanto el gobierno como la IP a través del CNA han rechazado la petición que se estima dará al traste a más de dos décadas de esfuerzo para crear un mercado comercial en común con abastecedores confiables a ese país.
México va a rechazar la propuesta estadounidense en la próxima reunión programada para Washington y hay la disposición de romper las negociaciones de ser necesario.
De hecho se anticipa que las gestiones de la próxima semana serán más ríspidas por el reiterativo mensaje político que maneja ya el equipo de EU encabezado por Robert Lighthizer en torno a defender los intereses del trabajador de EU.
Para la cuarta ronda vienen temas muy delicados que se anticipa se sumarán como obstáculos, en este caso la discusión de la reglas de origen, el capítulo 19 relativo a controversias, así como las exigencias en material laboral.
En ese sentido se puede decir que el TLCAN está en vilo.